Si se reciben fondos pero el destinatario no los acepta dentro de los 30 días, esos fondos seguirán reflejándose en el saldo disponible de la cuenta del destinatario. Sin embargo, es importante señalar que el destinatario debe aceptar los fondos para poder acceder y utilizarlos.

Si el período de 30 días transcurre sin que el destinatario acepte los fondos, estos serán devueltos al remitente. En este caso, los fondos se reflejarán en el saldo disponible del remitente. Es esencial que tanto el remitente como el destinatario se aseguren de la aceptación adecuada de los fondos dentro del plazo especificado.